Un estudio de la CEU-UCH propone nuevas medidas de fiscalidad internacionales para evitar la corrupción

valencia_uch_BNLa Universidad CEU Cardenal Herrera analiza, en una investigación, la cuantía y cobertura del Impuesto de Transacciones Financieras (ITF) que estudia lanzar  la UE para 2016. El estudio propone diversas medidas de fiscalidad internacional y financieras para poner límites a los movimientos internacionales de capitales y a los paraísos fiscales, vinculados a casos de corrupción.

“El impuesto a las transacciones financieras debería generalizarse a nivel internacional”. Esta es una de las principales propuestas del estudio realizado por el director del Departamento de Economía y Empresa de la Universidad CEU Cardenal Herrera, Enrique Lluch Frechina. Su investigación, publicada este mes de agosto en el especial “Reforma integral de España” de la revista científica Razón y fe, señala que el impuesto a las transacciones financieras fijado en la Unión Europea es insuficiente por tres motivos: su cuantía excesivamente baja, su alcance limitado a nivel internacional -ya que no lo aplicarán todos los países miembros de la UE- y su plazo, dado que no entrará en vigor hasta 2016. Sin embargo, es urgente generalizar este tipo de medidas fiscales internacionales, ya que podrían contribuir, según el profesor Lluch, a frenar los movimientos internacionales de capitales para evadir impuestos, especialmente los vinculados a casos de corrupción, como los de Pujol o Bárcenas.

El profesor de la CEU-UCH propone combinar esta mediada con la internacionalización del carácter progresivo de la fiscalidad, para gravar más a las rentas más altas en todo el mundo, y con la actuación internacional contra los paraísos fiscales, para que el nivel de impuestos no influya en las decisiones sobre el lugar de residencia de las personas y empresas con mayores beneficios. En esta línea, Lluch señala: “No podemos permitir que sea fácil para quien tiene suficientes recursos eludir el pago de impuestos. Debería elaborarse una regulación internacional que obligase a pagar los impuestos en el país en que se han generado los ingresos o beneficios; la legislación internacional debería impedir que las empresas puedan escapar del pago de impuestos fijando su sede en otro país”. Más información sobre el estudio.